La resurrección de los muertos

La resurrección es un proceso que se inicia cuando nacemos de nuevo del Espíritu, a partir de ese momento comenzamos a crecer y a desarrollarnos espiritualmente; pero como ese proceso ocurre mientras estamos viviendo en nuestros cuerpos mortales, se hace necesario también una resurrección de nuestros cuerpos, evento que ocurrirá en el futuro, después de nuestra muerte física, en el cual nuestros cuerpos mortales serán rescatados, transformados y glorificados.

La resurrección por lo tanto, consta de dos partes, la resurrección espiritual, la cual consiste en tener a Jesucristo vivo en nosotros; y la resurrección corporal, la cual consiste en la redención de nuestros cuerpos mortales. 
 
Juan 11:25  Dícele Jesús: Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. 

Rom 8:11 Y si el Espíritu de Aquél que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó a Cristo de entre los muertos, vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros. 
  
Rom 8:23  y no sólo ella, sino que también nosotros que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, esto es, la redención de nuestro cuerpo. 
 
 ¿Qué es la muerte? 
 
Rom 8:6 Porque el ocuparse de la carne es muerte (la mente carnal),  pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz (la mente de Cristo). 

Gal 5:19 Y las obras de la carne se manifiestan, que son:  adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, 
 
Gal 5:20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras,  contiendas, disensiones, herejías, 
 
Gal 5:21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas  semejantes acerca de las cuales os denuncio, como ya os he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. 

La muerte  espiritual es un estado del alma humana que las escrituras llaman “la mente carnal” y que se expresa cuando hacemos las “obras de la carne”. 
Es importante entender que cuando una persona muere físicamente, no va al "cielo" ni al "infierno" porque allí estaría consciente y tendría experiencias. Por el contrario, está "dormido" sin conciencia de nada hasta que se despierte (resucite en un nuevo cuerpo). 

¿Qué es la Vida?

Juan 17:3 Y esta es la vida eterna, que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo a quien has enviado. 

1Jn 5:20 Y sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para que podamos conocer al que es verdadero, y estamos en él que es el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna. 

Ahí lo tienen, "el conocimiento de Jesucristo" es tener la vida eterna
 
1Jn 2:03 Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos  sus mandamientos (aprendemos su doctrina).

Por eso, cuando resucitamos a la vida espiritual pasamos progresivamente de hacer las obras de la carne, (la muerte espiritual) a hacer las obras del Espíritu, (la vida eterna). Transitamos de la mente carnal a la mente de Cristo.

Gal 5:22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 
 
Gal 5:23 mansedumbre, templanza: contra tales cosas no hay ley.

Gal 5:24 Y los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. 
 
Debemos saber que el “Cuerpo de Cristo” está formado por las personas a quienes Dios elige abrir el entendimiento para que crean y entiendan su doctrina.

1Co 12:27 Ahora vosotros sois el cuerpo de Cristo, y cada uno de ustedes es una parte de él. 
 
Rom 12:4 Asi nosotros, siendo muchos, formamos un solo cuerpo en  Cristo, y todos miembros los unos de los otros.

1Co 12:12 Porque como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, y todos los miembros de ese cuerpo, siendo muchos, somos un solo cuerpo, así también es Cristo. 
 
1Co 12:13 Porque por un Espíritu somos todos bautizados en un cuerpo, sean Judíos o Griegos, siervos ó libres; ya a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.

1Jn 2:03 Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos. 
 
En las Escrituras, cuando se habla de Cristo, en realidad se está  hablando tanto de la persona en la que Cristo vivió en esta tierra, así como de sus seguidores, a los que se refiere como "el Cuerpo de Cristo". Por lo tanto, por todo lo que Cristo pasó cuando estuvo aquí en la tierra, su “Cuerpo” pasará por igual. Así como Cristo fue obediente al Padre hasta la muerte, así mismo lo será su “Cuerpo”. 
 
1Jn 4:17 En esto se ha perfeccionado el amor, para que tengamos confianza en el día del juicio, pues como él es, así somos nosotros en este mundo. 

Mat 4:4 Pero él respondió y dijo: Escrito está: El hombre no vive solamente de pan, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. 
 
En nuestro tiempo señalado todos vamos a vivir cada palabra de las Escrituras sea bueno o malo, incluyendo lo que Cristo pasó.

Rom 6:3 ¿No sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús fuimos bautizados en su muerte? 
 
Rom 6:4 Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que, al igual que Cristo fue resucitado de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.
 
La palabra bautismo en el idioma griego significa "lavar", y esto se hace con la palabra de Dios. 
 
Efesios 5:26 para santificarla, limpiándola en el lavamiento del agua por la palabra, 

Es por ser lavados por la palabra que morimos para que podamos vivir. La palabra de Dios es también un espada que nos mata. 
 
Efesios 6:17 Y tomad el yelmo de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios: 
 
Así que antes de que podamos resucitar espiritualmente, primero tenemos que morir espiritualmente. Como hemos visto anteriormente, si ya estamos muertos espiritualmente porque lo que tenemos es una mente carnal ¿cómo vamos a volver a morir? Estar espiritualmente muerto es vivir ocupandonos de las cosas terrenales, una forma de vida que las Escrituras llaman "andar en la carne". Tenemos que poner fin a esa antigua forma de vivir (morir en cuanto a la carne), para que podamos resucitar a una vida nueva. 
 
Efesios 2:2 que en otro tiempo anduvisteis conforme a la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia: 
 
Efesios 2:3 entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, satisfaciendo los deseos de la carne y de la mente, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los otros.

Dejando esta antigua forma de vivir la vida es como morimos espiritualmente. 
 
Juan 12:24 De cierto, de cierto os digo, si el grano de trigo no  cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, da mucho fruto.

Juan 12:25 El que ama su vida la perderá, y el que aborrece su vida en este mundo, la conservará para vida eterna. 

Juan 11:25 Jesús le dijo: "Yo soy la resurrección y la vida el que cree en mí vivirá, aunque este muerto; 
 
Juan 11:26 y todo aquel que vive y cree en mí no morirá jamás ¿Crees esto?

Juan 3:16 "Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él no perezca sino que tenga vida eterna. 
 
Rom 6:5 Porque si hemos estado unidos con él en una muerte como la suya, también lo seremos unidos con él en una resurrección como la suya. 

Rom 6:6 Sabemos que nuestro viejo hombre fue crucificado con él, para que el cuerpo del pecado sea reducido a la nada, de modo que ya no serán esclavos del pecado. 
 
Rom 6:7 El que ha muerto ha sido liberado del pecado. 

Rom 6:8 Ahora bien, si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él. 
 
Rom 6:9 Sabemos que Cristo, habiendo resucitado de entre los muertos ya no muere más; la muerte ya no tiene dominio sobre él. 

La Resurrección nos cambia de una persona terrenal a una persona espiritual, capaz de entender y conocer a Dios, dándonos vida abundantemente. 

1 Cor 2:14 El hombre natural no percibe las cosas del Espíritu de Dios, porque son locura, y él no es capaz de entender, porque se han de discernir espiritualmente. 
 
1 Cor 2:16 "Porque ¿quién entendió la mente del Señor para instruirle?" Pero nosotros tenemos la mente de Cristo. 
 
Gal 2:20 He sido crucificado con Cristo: ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí: y la vida que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, que me amó y se entregó por mí. 
 
Juan 3:3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. 

 ¿Qué es el Reino de Dios? 
 
Lucas 17:21 ni dirán: Helo aquí o helo allí, porque he aquí el reino de Dios está dentro de ti.

Colosenses 1:27 A quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de la gloria.

 Así es como tenemos la esperanza de que estamos vivos espiritualmente y haciendo las obras del Espíritu: El reino de Dios es Cristo viviendo su vida en ti y tomando el control  progresivo de la tuya, mediante el nacimiento y formación de un nuevo hombre, tu Hombre Espiritual; y la destrucción progresiva (la muerte espiritual, no la física ) de tu viejo hombre, el hombre terrenal.

Este es un cambio completo de nuestra vieja manera de pensar. La vida ya no es para ser gastada viviendo en el temor de un infierno eterno, o viviendo tras los placeres temporales del pecado, sino más bien debe centrarse en la conciencia de que Cristo vive en nosotros y que nos capacita para vencer los deseos y pasiones de la carne, pues nosotros por nosotros mismos no podemos hacer nada para salvarnos.  
  
Esperamos nuestra resurrección y la resurrección de toda la humanidad, pero nos centramos en lo que Cristo está haciendo ahora, viviendo su vida en nosotros para edificarnos y hacernos a la imagen y semejanza perfecta de Dios. 
 
Rom 6:10 Porque la muerte fue un morir al pecado, una vez por todas, pero la vida que es un vivir para Dios. 

Rom 6:11 Así también vosotros, consideraos como muertos al pecado y vivos para Dios en Cristo Jesús.

Rom 6:12 No dejes que el pecado reine, pues, en vuestro cuerpo mortal, para que obedezcas a sus pasiones. 

Rom 6:13 Ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como  instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como quienes han vuelto de la muerte a la vida, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia. 
 
Después de habernos dado la vida, ahora tenemos un nuevo propósito, crecer en el conocimiento de la verdad (la doctrina de Jesucristo)  hasta que el Cristo sea formado en nosotros. 
 
Rom 6:19 Yo hablo en términos humanos, a causa de sus limitaciones naturales. De la misma manera que una vez presentaron vuestros miembros como esclavos a la impureza y a la iniquidad que conduce a la anarquía, así que ahora presentad vuestros miembros como esclavos a la justicia que lleva a la santificación.

Cuando el Señor nos viene a levantar a la vida con frecuencia nos lamentamos por la pérdida de nuestra antigua forma de vivir. Es algo normal, lo importante es tener en cuenta las obras que nuestra antigua vida producian.

Gal 5:19 Y las obras de la carne son evidentes, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, 
 
Gal 5:20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, 
 
Gal 5:21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes acerca de las cuales os denuncio, como ya os he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. 

Rom 6:20 cuando erais esclavos del pecado, erais libres acerca de la justicia. 
 
Rom 6:21 Pero, ¿qué fruta se te va en ese momento de las cosas de las cuales ahora os avergonzáis? El fin de esas cosas es la muerte. 
 
Rom 6:22 Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, el fruto se obtiene conduce a la santificación y de su fin la vida eterna. 
 
Rom 6:23 la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. 
 
Gal 6:9 Y no nos cansemos de hacer el bien, porque a su tiempo segaremos, si no se dan por vencidos. 
 
1Co 15:21 Porque así como por un hombre vino la muerte, por un hombre viene la resurrección de los muertos. 
 
1Co 15:22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. 
 
1Co 15:23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias, luego a su llegada los que pertenecen a Cristo. 
 
En la Escritura hay una primera y segunda resurrección. La primera resurrección ocurre en aquellos que nacen de nuevo espiritualmente durante su vida física, es decir aquellos que forman parte del  Cuerpo de Cristo, mientras que la segunda resurrección ocurrirá a el resto de la humanidad después de su muerte física. Para que este proceso funcione, Dios revela su verdad a un grupo selecto que llaman "elegidos" o  "escogidos", mientras que oculta temporalmente la verdad al resto de la humanidad. 
 
Mat 3:2 Y se congregaron junto a El grandes multitudes, por lo  que subió a una barca y se sentó; y toda la multitud estaba de pie en la playa. 
 
Mat 13:03 Y él habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar;

Mat 13:10 Y acercándose los discípulos, y le dijo: ¿Por qué les hablas en parábolas? 

Mat 13:11 Respondiendo él, les dijo: Porque vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos, pero a ellos no les es dado.

Mat 22:14 Porque muchos son llamados, pero pocos son escogidos. 
 
Estos escogidos son el Cuerpo de Cristo y serán usados ​​por Dios para juzgar y salvar al resto de la humanidad, cuando llegue la hora señalada. 
 
Apo 20:4 También vi tronos, y se sentaron sobre ellos, y se les concedió autoridad para juzgar. Y vi las almas de los que habían sido decapitados por causa del testimonio de Jesús y de la palabra de Dios, y a los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, ni habían recibido la marca sobre su frente ni sobre su mano; y volvieron a la vida y reinaron con Cristo por mil años.

Todo aquel que no es nacido espiritualmente en esta vida, no podrá resucitar en la primera resurección, pero será levantado de los muertos en una segunda resurreción donde será juzgado y salvado por los que resucitaron en la primera. 
 
1Co 15:42 Así también es la resurrección de los muertos.Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción; 
 
1Co 15:43 Se siembra en deshonra, resucitará en la gloria: se siembra en debilidad, se resucitará en el poder: 
 
1Co 15:44 Se siembra un cuerpo natural, resucita un cuerpo espiritual. Hay un cuerpo natural, y hay un cuerpo espiritual.

Ap 20:13 Y el mar entregó los muertos que estaban en él, y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. 

Ap  20:14 Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la segunda muerte. 
 
Ap 20:15 Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego. 
 
En un momento  del futuro habrá una resurrección general de todos los muertos y se expondrán a un juicio para purificación, conversión y salvación llamado “el Juicio del Gran Trono Blanco", Lago de Fuego o “Muerte Segunda” Con la excepción de aquellos que nacieron espiritualmente en esta vida estando en sus cuerpos de carne  y que resucitaron en esa gloriosa y santa primera resurrección.


 Flp 3:10 y conocerle a El, el poder de su resurrección y la participación en sus padecimientos, llegando a ser como El en su muerte, 
 
Flp 3:11 a fin de llegar a la resurrección de entre los muertos. 
 
Flp 3:12 No que ya lo haya alcanzado o que ya haya llegado a ser perfecto, sino que sigo adelante, a fin de poder alcanzar aquello para lo cual también fui alcanzado por Cristo Jesús. 
 
Flp 3:13 Hermanos, yo mismo no considero haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y extendiéndome a lo que está delante, 
 
Flp 3:14 prosigo hacia la meta para obtener el premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. 

Mat 24:10 Entonces muchos tropezarán, y se entregarán unos a otros  y se odiarán. 
 
Mat 24:11 Y muchos falsos profetas se levantarán y engañarán a muchos. 

Mat 24:12 y por haber aumentado la maldad, el amor de muchos se  enfriará. 

Mat 24:13 Mas el que persevere hasta el fin será salvo.

Ap 17:14 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes, y los que con él están son llamados y elegidos y fieles.