- El regreso de Cristo
- Introducción
- El reino de los cielos esta dentro de ti
- Sabias que...
- Las llaves del reino
- Chispas de Luz
- Dios te habla...
- El nuevo pacto y sus promesas
- El plan de Dios
- Todos seremos salvos
- El nuevo templo
- El sueño del faraón
- Las parábolas
- La realidad espiritual
- La salvación
- Los elegidos
- Salvos por gracia
- Reinaremos con Cristo
- Babilonia
- La gran ramera
- La Bestia
- La marca de la Bestia
- Satanás
- El fuego consumidor
- La libertad
- El bautismo
- La navidad
- La ley del Espíritu
- La ley de Moisés
- La muerte primera
- La muerte segunda
- La expiación
- La resurrección
- La apostasía
- El anticristo
- El último hombre
- El milenio
- La verdadera Iglesia
- Profecías
- El final de los tiempos
- El Infierno
- De la muerte a la vida
- El sermón de la montaña
- La mostaza y la levadura
- Parábola de los talentos
- Parábola del sembrador
- La cizaña del campo
- El ciego de nacimiento
- El hijo pródigo
- Los dos bebés
- Deidad - Poema
- El Trono - Prosa Poética
- Alborada - Prosa Poética
- El Viaje - Prosa Poética
- El Amor - Prosa Poética
- Angelitos Negros - Poema
- El Amigo - Prosa Poética
- Bendíceme - Poema
- Mis muertos
- Tu Yo Soy
- La vida es asi....
- Oración
- Escritos de Mike Vinson y Ray Smith
- Evangelios apócrifos
- Los manuscritos del Mar Muerto
- Sispo
- Escríbeme!!!
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El verdadero cielo no es el cielo que vemos con nuestros ojos, el verdadero cielo es el escenario donde se desarrolla la vida espiritual, la cual ocurre en nuestro ser interior. El mundo exterior que percibimos con nuestros cinco sentidos y el que descubrimos a través de la ciencia y la tecnología es solo una imagen del universo espiritual infinito que está dentro de nosotros pero que no podemos captar en su plenitud por las limitaciones de nuestra mente y la dureza de nuestro corazón. Si Dios nuestro amado Padre nos concede la gracia de abrir nuestro entendimiento, Él nos envía a su Hijo, el Verbo, gracias al cual podremos progresivamente ir descubriendo ese nuevo y verdadero cielo que como ríos de agua viva subyace dentro de nosotros mismos.
El reino de los cielos esta dentro de ti
No se puede buscar el reino de Dios si no sabemos primero que ese reino se está construyendo dentro de tu propio cuerpo mortal para que la bestia que habita en ti (la mente terrenal), pueda ser destruida y un hombre nuevo se pueda formar a la imagen del Hijo de Dios (la mente de Cristo), el cual será el nuevo Adán que regirá junto con Cristo el nuevo mundo por venir.
No podemos buscar el reino de Dios mientras estamos buscando la riqueza material y colocando el engaño de las riquezas por encima del reino de Dios, o por el contrario, renunciando a todo cuanto tenemos, creyendo que así hallaremos a Dios. Sólo podemos encontrar el reino de Dios cuando sabemos cuál es la Verdad, y la Verdad es Cristo.
No podemos buscar el reino sin primero buscar el rey. El rey es la verdad y la vida, el rey y el reino son la misma cosa. El rey es Cristo Jesús, y El es su Palabra (su doctrina, su evangelio, su enseñanza). Cuando entiendes su Palabra estas conociendo a Dios El Padre y a su Hijo Jesús El Cristo, y si conoces a Cristo tienes vida eterna en ti mismo, y habrás encontrado el tesoro escondido, el reino de Dios.
"Dios, la Luz admirable, ha decidido plantar el Árbol de la Vida en el nuevo Edén, el cual está en tu mente y en tu corazón. Al ser sembrada la semilla de la Palabra en ti, ese maravilloso árbol de vida crecerá hasta ser el más grande del universo".
Deu 30:11 Este mandamiento que yo te ordeno hoy no es muy difícil para ti, ni está fuera de tu alcance.
Deu 30:12 No está en el cielo, para que digas: "¿Quién subirá por nosotros al cielo para traérnoslo y hacérnoslo oír a fin de que lo guardemos?"
Deu 30:13 Ni está más allá del mar, para que digas: "¿Quién cruzará el mar por nosotros para traérnoslo y para hacérnoslo oír, a fin de que lo guardemos?"
Deu 30:14 Pues la palabra está muy cerca de ti, en tu boca y en tu corazón, para que la guardes.
Pero todo esto que acabas de leer no se cumple de un día para otro, por lo contrario es un proceso que dura toda tu vida física, siendo tu propio cuerpo y mente, el escenario de una lucha sin tregua ni cuartel entre dos grandes y poderosos enemigos: el hombre terrenal (la Bestia) que hasta ahora reina sobre tu alma (por un poco de tiempo) y el hombre espiritual (el Cristo); el nuevo conquistador que vencerá y destruirá a la Bestia, a las falsas doctrinas de la Iglesia Apostata, y a Satán, el rey de este Mundo y su Imperio de Muerte.
Lucas 17:20 Habiéndole preguntado los fariseos cuándo vendría el reino de Dios, Jesús les respondió, y dijo: El reino de Dios no viene con señales visibles,
Lucas 17:21 ni dirán: "¡Mirad, aquí está!" o: "¡Allí está!" Porque he aquí, el reino de Dios entre (dentro de) vosotros está.
Juan 17:3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.