- El regreso de Cristo
- Introducción
- El reino de los cielos esta dentro de ti
- Sabias que...
- Las llaves del reino
- Chispas de Luz
- Dios te habla...
- El nuevo pacto y sus promesas
- El plan de Dios
- Todos seremos salvos
- El nuevo templo
- El sueño del faraón
- Las parábolas
- La realidad espiritual
- La salvación
- Los elegidos
- Salvos por gracia
- Reinaremos con Cristo
- Babilonia
- La gran ramera
- La Bestia
- La marca de la Bestia
- Satanás
- El fuego consumidor
- La libertad
- El bautismo
- La navidad
- La ley del Espíritu
- La ley de Moisés
- La muerte primera
- La muerte segunda
- La expiación
- La resurrección
- La apostasía
- El anticristo
- El último hombre
- El milenio
- La verdadera Iglesia
- Profecías
- El final de los tiempos
- El Infierno
- De la muerte a la vida
- El sermón de la montaña
- La mostaza y la levadura
- Parábola de los talentos
- Parábola del sembrador
- La cizaña del campo
- El ciego de nacimiento
- El hijo pródigo
- Los dos bebés
- Deidad - Poema
- El Trono - Prosa Poética
- Alborada - Prosa Poética
- El Viaje - Prosa Poética
- El Amor - Prosa Poética
- Angelitos Negros - Poema
- El Amigo - Prosa Poética
- Bendíceme - Poema
- Mis muertos
- Tu Yo Soy
- La vida es asi....
- Oración
- Escritos de Mike Vinson y Ray Smith
- Evangelios apócrifos
- Los manuscritos del Mar Muerto
- Sispo
- Escríbeme!!!
La Gran Ramera
Ap 13:1 Y yo me paré sobre la arena del mar, y vi una bestia subir del mar que tenía siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cuernos diez diademas, y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.
Ap 17:1 Y vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo, diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera que está sentada sobre muchas aguas:
Ap 17:2 Con ella los reyes de la tierra han fornicado, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.
Ap 17:3 Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.
Ap 17:15 Y él me dice: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
Tanto tu como yo somos la bestia, simplemente porque las Escrituras nos dicen que el 666 "es el número que representa a la humanidad", y que "los hombres ... somos semejantes a las bestias"
Ap 13:18 Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia; porque es el número del hombre; y su número es seiscientos sesenta y seis.
Ecl 3:18 Dije en mi corazón: En cuanto a la condición de los hijos de los hombres, que Dios los pruebe, para que ellos mismos vean que son semejantes a las bestias.
Por eso, cuando leemos que la bestia blasfema contra Dios, sabemos que está hablando de nosotros, que desobedecemos los mandamientos de Dios y hacemos lo que queremos, y no lo que su palabra nos dice que debemos hacer, a pesar del buen ejemplo que Él mismo siempre nos da.
Mateo 7:21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Lucas 6:46 Y por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo?
Tu mente y tu corazón son el templo de Dios, por lo tanto cuando lees que el hombre de pecado se sienta en el templo de Dios haciéndose pasar por Dios, la escritura se está refiriendo a ti!.. pues tu mente es engañada y tu corazón es seducido por la gran ramera, sentándote en el templo de Dios desafiando a Cristo para destronarlo, diciendo: "¿Quién puede hacer guerra contra la bestia?"
2 Tes 2:3 Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y que el hombre de pecado sea revelado, el hijo de perdición;
2Ts 2:4 El cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto, de modo que él como Dios se sienta en el templo de Dios, haciéndose pasar por Dios.
Ap 13:1 Y yo me paré sobre la arena del mar, y vi una bestia subir del mar [figura de toda la humanidad], que tenía siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cuernos diez diademas, y sobre sus cabezas el nombre de blasfemia.
Ap 13:2 Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies eran como los pies de un oso, y su boca como boca de león y la dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad.
Ap 13:3 Y vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada [aceptando las falsas doctrinas de la gran ramera] y todo el mundo se maravilló en pos de la bestia.
Ap 13:4 Y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: Quién como la bestia? quien es capaz de hacer la guerra con él?
Ap 13:5 Y le fue dada boca que hablaba grandes cosas y blasfemias;[falsas doctrinas y medias verdades] y le fue dada potestad de actuar cuarenta y dos meses.
Ap 13:6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su nombre, de su tabernáculo, y los que moran en el Cielo.
¿Quién es la ramera, que cabalga a la bestia? ¿Qué otra cosa es esta bestia? ¿Que son las aguas en las que la ramera se sienta? La respuesta está aquí mismo, en los siguientes versos:
Ap 17:1 Y vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo, diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera que está sentada sobre muchas aguas: [estas aguas representan a la bestia, la cual es una figura de toda la humanidad].
Ap 17:2 Con ella los reyes de la tierra han fornicado, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.
Ap 17:3 Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.
Ap 17:15 Y él me dice: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas. [la bestia escarlata, es decir toda la humanidad]
Así que son esos ministros, pastores, profetas y sacerdortes que se llaman asi mismos "cristianos" los que enseñan a las muchedumbres las doctrinas falsas de esta "gran ramera". Ella es una prostituta porque ella no ve nada malo en juntarse con otro "hombre", pues mientras afirma ser la esposa de Cristo se asocia y negocia con las doctrinas de los hombres.
Isaias 4:1 Acontecerá en aquel tiempo que siete mujeres echarán mano de un hombre, diciendo: Nosotras comeremos de nuestro pan [nuestras propias doctrinas], y vestiremos con nuestras ropas [nuestros "trapos de inmundicia ...muchas obras maravillosas en tu nombre"]; solamente permítenos llevar tu nombre para quitar nuestro oprobio.
Mat 15:9 Mas en vano me honran, Enseñando doctrinas y mandamientos de hombres.
Ella es tan hermosa, y ella está llena de buenas obras, y por lo tanto seduce a "todo el mundo"
Mateo 7:22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre? y en tu nombre echamos fuera demonios?, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
La respuesta es que si, en el nombre de Jesucristo profetizan, en su nombre echan fuera demonios, y en su nombre hacen muchos milagros y buenas obras. Pues Dios les ha dado un "poder engañoso".
Ts 2:11 Por tanto, pues, les envía Dios operación de error, para que crean á la mentira;
Es Dios quien engaña a los ministros de esta gran ramera que domina toda carne, y quien les da el poder de realizar milagros ante la presencia de la bestia que habita dentro de nosotros.
Ap 13:11 Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como un dragón.
Ap 13:14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia, que tiene la herida de cuchillo, y vivió.
Así que cada uno de nosotros es la bestia, y llevamos la imagen de la bestia, y estamos dominados espiritualmente por esta gran ramera, que hace muchos milagros y obras maravillosas para "engañar a los que moran sobre la tierra". Pero presta atención a esta advertencia de Dios mismo:
Eze 14:9 Y cuando el profeta fuere engañado y hablare palabra, yo Jehová engañé al tal profeta; y extenderé mi mano contra él, y le raeré de en medio de mi pueblo Israel.
Eze 14:10 Y ambos llevarán el castigo de su maldad; el castigo del profeta será igual que el castigo de quien le consulta;
Stg 3:1 Hermanos míos, no os hagáis muchos maestros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.
Espero que todos estos versículos de las Escrituras te ayuden a "hacer la guerra contra la bestia" y a "apartarte de la gran ramera que cabalga sobre la bestia escarlata" pues a ellos el Cristo, el nuevo Adan ha venido a vencer....
Traducción libre de Sispo Sasposi de textos originales en ingles de Mike Vinson.
Ap 17:1 Y vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo, diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera que está sentada sobre muchas aguas:
Ap 17:2 Con ella los reyes de la tierra han fornicado, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.
Ap 17:3 Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.
Ap 17:15 Y él me dice: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
Tanto tu como yo somos la bestia, simplemente porque las Escrituras nos dicen que el 666 "es el número que representa a la humanidad", y que "los hombres ... somos semejantes a las bestias"
Ap 13:18 Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia; porque es el número del hombre; y su número es seiscientos sesenta y seis.
Ecl 3:18 Dije en mi corazón: En cuanto a la condición de los hijos de los hombres, que Dios los pruebe, para que ellos mismos vean que son semejantes a las bestias.
Por eso, cuando leemos que la bestia blasfema contra Dios, sabemos que está hablando de nosotros, que desobedecemos los mandamientos de Dios y hacemos lo que queremos, y no lo que su palabra nos dice que debemos hacer, a pesar del buen ejemplo que Él mismo siempre nos da.
Mateo 7:21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Lucas 6:46 Y por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo?
Tu mente y tu corazón son el templo de Dios, por lo tanto cuando lees que el hombre de pecado se sienta en el templo de Dios haciéndose pasar por Dios, la escritura se está refiriendo a ti!.. pues tu mente es engañada y tu corazón es seducido por la gran ramera, sentándote en el templo de Dios desafiando a Cristo para destronarlo, diciendo: "¿Quién puede hacer guerra contra la bestia?"
2 Tes 2:3 Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y que el hombre de pecado sea revelado, el hijo de perdición;
2Ts 2:4 El cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto, de modo que él como Dios se sienta en el templo de Dios, haciéndose pasar por Dios.
Ap 13:1 Y yo me paré sobre la arena del mar, y vi una bestia subir del mar [figura de toda la humanidad], que tenía siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cuernos diez diademas, y sobre sus cabezas el nombre de blasfemia.
Ap 13:2 Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies eran como los pies de un oso, y su boca como boca de león y la dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad.
Ap 13:3 Y vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada [aceptando las falsas doctrinas de la gran ramera] y todo el mundo se maravilló en pos de la bestia.
Ap 13:4 Y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: Quién como la bestia? quien es capaz de hacer la guerra con él?
Ap 13:5 Y le fue dada boca que hablaba grandes cosas y blasfemias;[falsas doctrinas y medias verdades] y le fue dada potestad de actuar cuarenta y dos meses.
Ap 13:6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su nombre, de su tabernáculo, y los que moran en el Cielo.
¿Quién es la ramera, que cabalga a la bestia? ¿Qué otra cosa es esta bestia? ¿Que son las aguas en las que la ramera se sienta? La respuesta está aquí mismo, en los siguientes versos:
Ap 17:1 Y vino uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo, diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera que está sentada sobre muchas aguas: [estas aguas representan a la bestia, la cual es una figura de toda la humanidad].
Ap 17:2 Con ella los reyes de la tierra han fornicado, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.
Ap 17:3 Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.
Ap 17:15 Y él me dice: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas. [la bestia escarlata, es decir toda la humanidad]
Así que son esos ministros, pastores, profetas y sacerdortes que se llaman asi mismos "cristianos" los que enseñan a las muchedumbres las doctrinas falsas de esta "gran ramera". Ella es una prostituta porque ella no ve nada malo en juntarse con otro "hombre", pues mientras afirma ser la esposa de Cristo se asocia y negocia con las doctrinas de los hombres.
Isaias 4:1 Acontecerá en aquel tiempo que siete mujeres echarán mano de un hombre, diciendo: Nosotras comeremos de nuestro pan [nuestras propias doctrinas], y vestiremos con nuestras ropas [nuestros "trapos de inmundicia ...muchas obras maravillosas en tu nombre"]; solamente permítenos llevar tu nombre para quitar nuestro oprobio.
Mat 15:9 Mas en vano me honran, Enseñando doctrinas y mandamientos de hombres.
Ella es tan hermosa, y ella está llena de buenas obras, y por lo tanto seduce a "todo el mundo"
Mateo 7:22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre? y en tu nombre echamos fuera demonios?, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
La respuesta es que si, en el nombre de Jesucristo profetizan, en su nombre echan fuera demonios, y en su nombre hacen muchos milagros y buenas obras. Pues Dios les ha dado un "poder engañoso".
Ts 2:11 Por tanto, pues, les envía Dios operación de error, para que crean á la mentira;
Es Dios quien engaña a los ministros de esta gran ramera que domina toda carne, y quien les da el poder de realizar milagros ante la presencia de la bestia que habita dentro de nosotros.
Ap 13:11 Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como un dragón.
Ap 13:14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia, que tiene la herida de cuchillo, y vivió.
Así que cada uno de nosotros es la bestia, y llevamos la imagen de la bestia, y estamos dominados espiritualmente por esta gran ramera, que hace muchos milagros y obras maravillosas para "engañar a los que moran sobre la tierra". Pero presta atención a esta advertencia de Dios mismo:
Eze 14:9 Y cuando el profeta fuere engañado y hablare palabra, yo Jehová engañé al tal profeta; y extenderé mi mano contra él, y le raeré de en medio de mi pueblo Israel.
Eze 14:10 Y ambos llevarán el castigo de su maldad; el castigo del profeta será igual que el castigo de quien le consulta;
Stg 3:1 Hermanos míos, no os hagáis muchos maestros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.
Espero que todos estos versículos de las Escrituras te ayuden a "hacer la guerra contra la bestia" y a "apartarte de la gran ramera que cabalga sobre la bestia escarlata" pues a ellos el Cristo, el nuevo Adan ha venido a vencer....
Traducción libre de Sispo Sasposi de textos originales en ingles de Mike Vinson.